Ir al contenido principal


“Mis poemas no son mis poemas”



Maestro Zen Ryokan
Poema Kanshi



El primer día de verano
me pongo mi túnica con desgano

Al filo del agua
los sauces se han tornado
en un verde intenso
Al lado opuesto de la ribera
Las flores de durazno y ciruela
Se dispersan en la brisa matutina

Deambulo arrancando briznas de mala hierba
Inadvertidamente llamo a una puerta cubierta de maleza

Las mariposas retozan en el sur del jardín
Las flores de nabo obstruyen
la valla de bambú en el lado este

Aquí, en una atmósfera de perfecta tranquilidad
Los días largos de verano
Se prolongan sin fin
Un lugar tan remoto es llamativo en sí mismo
Fácilmente movido por la hermosura
--así es mi naturaleza
Tomo algunas palabras
Y se convierten por sí solas en poemas
¿Quién puede decir que mis poemas son mis poemas?
Mis poemas nunca han sido míos
Cuando entiendas que mis poemas realmente no son mis poemas
entonces podremos hablar juntos con poesía.


Traducción del inglés de Raúl Carrillo-Arciniega

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Del vacío digital A estas alturas hablar de cómo la tecnología ha cambiado la forma en que el ser humano interactúa es ya un lugar común. Tanta información ha acabado por desnudar a todo el género humano --clase mediero e integrado-- por más insignificante y miserable que parezca. Es posible “googlear” a toda la lista de amigos olvidados de la infancia y ver si por ventura gozan de algún lado o espacio cibernético para materializase desde el pasado, ya sea como en uno de estos o en alguno de las llamadas "redes sociales" en donde la mayoría busca sumar amigos, un millón de amigos si es preciso. Según he leído en algún artículo del New York Times (ahora con acciones de nuestro orgullo nacional Carlos Slim), estas redes sociales se comportan como sociedades primitivas en las que a través de signos, señales breves, el mundo se entera de lo que haces en ese preciso momento, de las dificultades que has tenido para comer, respirar o concentrarte. La información resulta ser lo más ...

En la tierra de Op 3 Caps 4 5

¿Adónde te fuiste Romeo, todo herido? En este video Tom Waits nos presenta cómo la maestría se alcanza en cada aullido que deja que las palabras abran la herida de la hombría, la herida con la que Romeo, un “ese” cualquiera, presume y se asume. Con una bala en el pecho, ahora inmolado, se dirige a la representación de su propio espectáculo en la pantalla de un cine ¿cuál es el heroísmo de Romeo? Ser ese , un ese con el que los parlantes de esta lengua maldita, tan degradada por estas landas, nos mimetizamos; al que todos absurdamente aspiramos: todo un "pinche Pancho" que aúlla en las noches para que no le arranquen los huevos, todo un Sansón mitológico al este, siempre lejos, de los ángeles… “Hagan la lucha...”